Me jode que ciertas personas se mueran.
Me jode perder la oportunidad de seguir disfrutando de ellas.
Pero me jode que sólo nos acordemos de ellas cuando lo hacen. Y me jode aún más que les llenemos de alabanzas, que lamentemos que no consiguieran ciertos reconocimientos cuando, probablemente, nosotros no hicimos nada para que se los dieran y nuestra memoria nos juega malas pasadas, edulcorando y perfeccionando. Lamentamos lo perdido pero no lamentamos en lo que nosotros, uno por uno, fallamos.
Y no digo más: me jode y punto.
[Imagen: Factory Girl Photography]
Acabo de llegar a tu nueva dirección, mola! Leo y te digo.
De momento, viva Labordeta! (si es que era por él la entrada)
Te cambio la dirección en mi blog 😉
Pues sí, era un poco por él y por otros tantos que desaparecen y que sólo echamos de menos cuando ocurre algo así